martes, 30 de abril de 2013

Siesta

Aprovechando que tengo al pequeño dormido, voy a actualizar el blog, que llevo una semana sin poder hacerlo.


Con los exámenes a menos de una semana, me veo con el tiempo justo para el resto de cosas. Teniendo en cuenta que, por mucho que digan, ser au pair no es un trabajo sencillo, me quedan pocas horas para estudiar y hacer los trabajos, sin tener en cuenta que tengo que hablar con la familia y amigos. Muchas cosas y pocas horas!

El domingo me veré de nuevo en un avión rumbo a España, con muchas ganas de volver a ver a mi gente, pero principalmente para presentarme a los exámenes (miedo....).
 

La semana anterior fue relativamente tranquila, a excepción de que al pequeño le están terminando de salir los dientes y hay veces que está que rabia. El viernes me tocó quedarme por la noche con los niños, y el sábado por la mañana también, así que mi fin de semana se ha reducido a sábado tarde en Navan para comprar la ropa de la comunión de la mediana, y domingo un mix de estudiar, ir a una obra de colegio donde ella actuaba, y ''ver'' una película con ellos, aunque a la mitad me bajé porque... tras una hora en el sofá sólo habíamos visto 20 minutos entre los niños chillando, el pare dudando sobre que película, etc... En fin, que tenía que estudiar y entendieron que no podía estar distrayéndome a una semana.


Haciendo ''casas'' dentro de casa...
El viernes de esta semana llegará la primera au pair que vino a esta casa, la verdad que estoy algo temerosa por las comparaciones que puedan surgir entre ambas. La madre también estará en casa, se ha cogido el día libre para preparar todo para el sábado, así que si se me permite, aprovecharé para un repaso final.

Pese a haber dedicado bastante tiempo a estudiar, entre el trabajo y, para que negarlo, que me distraigo con el pedo de una mosca, soy consciente que le tengo que meter mucha caña si quier unos resultados de los que estar orgullosa.

Como puede verse en la entrada, no hago más que hablar de los finales, así que sintiéndolo por tan corta entrada, me despido, los 20 minutos que le quedan a Eoin de siesta me gustaría aprovecharlos para organizarme las tareas de la tarde-noche.

Gracias por pasaros!

(Subo ahora la entrada porque este mediodía no me dejaba subir las imágenes)

domingo, 21 de abril de 2013

Camino a las 3 semanas

Como dice el título, dos días y habré cumplido las tres semanas aquí.

Vistas al salir de casa
Ahora que empiezo a adaptarme, puedo decir que ya he encontrado cositas que no me acaban de gustar, de las que creo que podría quejarme.
Para empezar, mañana me toca trabajar de nuevo, y por lo que veo hay ropa seca encima de un sofa, un tendedero lleno, y una lavadora por tender. Como me esperaba desde esta mañana, se va acumulando y el lunes me va a tocar planchar todo (sí, se que mi trabajo no debería ser planchar, pero bueno, acordé con la familia que no suponia un problema, claro que no me esperaba esto...).

Cuando hoy me he levantado, he visto que el lavavajillas (puesto ayer, ya limpio) seguía sin haberse recogido, todos los platos, vasos y demas esperando a que se fuesen solos a sus armarios. Tonta de mí lo he recogido, aunque no me ha llevado más de cinco minutos, pero vamos, que no muevo ni un dedo más en lo que queda de fin de semana.
En fin, que me encantan y se portan genial (hoy la madre me ha hecho la comida mientras yo estudiaba), pero son más perezosos que yo, y eso ya es decir.
Cuando decidí barrer un poco a fondo este jueves me quedé a cuadros con la de... bueno, para que cortarse, con la de mierda que había. Matojos de polvo que si no los llego a quitar ahí siguen.

Tengo el defecto o virtud de ser muy perfeccionista, pese a ser un poco dejada, pero no puedo ''sólo barrer por encima'', necesito que las cosas no se dejen a medias, pero a partir de ya voy a hacer las tareas de la casa que me tocan poco a poco y con muuuucha calma, pues no es mi trabajo al fin y al cabo, y creo que como siga haciendo lo que no me toca se van a acomodar más de lo que están. Si no les gusta como lo hago, que lo hagan ellos, que el fin de semana tienen tiempo y mi trabajo es cuidar a los nenes, no aspirarles la moqueta del cuarto.

Dejando de lado lo que no me gusta (ah, olvidé añadir los 18€ que me cuesta ir y volver a Dublín), los niños ya me tratan casi como una más.
Ayer estuvimos todos viendo una película y la mediana se paso todo el rato pegada a mí, a excepción de una vez que se fue al baño y el mayor le quitó el sitio y me empezó a abrazar. Cuando volvió y se encontró con el panorama empezó a pegarle, me sentí como en una película donde se pelean por poder estar conmigo, no podía parar de reírme, aunque suene cruel.

sweeney's bar, night
El fin de semana lo pasé en Dublin. No me gusta mucho eso de que la gente empiece a salir a eso de las 6pm; a las 10 ya te encuentras alcohólicos bailando, cantando, peleando por cualquier calle, y a las 3 es bastante difícil encontrar algo decente donde ir. El lado bueno, la gente es muy simpática, muchos podrán pensar que eso es por ser chica, pero para nada. No hay la ansiedad de ir empujando en los sitios llenos, los borrachos que te cuzas se te ponen a hablar (pero, mayormente, no en plan pesado-empalagoso) y cuando estas algo aburrido es muy posible que aparezca el típico ''conocido'' de 15 minutos del fin de semana anterior y puedas entablar una conversación.



Las temperaturas estan empezando a subir. Podemos llegar a los 12º por la noche, que os puedo asegurar que es maravilloso. Aunque los cafés no suelen bajar de los 3€ en cualquier bar, rebuscando un poco puedes localizar más de un SPAR o Londis donde te puedes tomar uno por 1€, chollo!

Esperando no haberme alargado mucho, aprovecho para decir que estoy bien a mi familia, no os preocupeis que en dos semanas me tenéis por ahí dando guerra. Espero que esta semana sea más tranquila que la anterior y el niño eche la siesta, sólo pido eso!!

Muchas gracias a todos los que me leéis, espero poder ayudar o como mínimo que os entretengais un poco. Cualquier propuesta o cosas que creais que se puedan mejorar son bienvenidas!

jueves, 11 de abril de 2013

Actualizando

Podría decir que sigo encantada con la familia, sobretodo ahora que el pequeñajo se ha acostumbrado a mí, es adorable cuando se intenta limpiar la boca en mis pantalones. El mayor es un encanto de niño, me ayuda con los hermanos pequeños pese a que sólo tiene 11! La niña, menudo trasto está hecho! Aunque eso no es lo malo, yo era peor, por lo que se por donde me va a salir cuando intenta tramar algo. El problema con la nena son los llantos, tooooodo se soluciona llorando, le dicen que no, tiene que hacer deberes, hora de cenar, se ha terminado el zumo que le gusta, solución, sí, llorar.

Los padres no hacen más que intentar que me sienta cómoda. Me sabe mal porque pese a sus intentos, me falta un poco para llegar a sentirme como en casa pero seguro que ellos lo comprenden. La madre es muy atenta, y la que se encarga principalmente de organizar mis tareas. Intenta también que yo esté a gusto y que después de comer haga el favor de no ayudarla más y descanse.

El padre es peor que un niño, aunque me lo paso genial con él. Es un friki, cosa que tenemos en común. El otro día estuvimos tocando, tiene unas 7 guitarras, y no conté los amplificadores ni los pedales que tenía. Acabé llevándome un bajo y dos libros para aprender a tocar a mi habitación. Es muy gracioso ver como se pelea con el bebe porque la ultima bolsita de ''maltesers'' está a punto de acabarse, los dos revolcándose por el suelo y haciendo sonidos que un teclado no es capaz de escribir.

En general podría decir que he tenido mucha suerte con el trato que me ofrece esta familia. Claro está que todo se paga, porque de trabajar... estoy más que harta. Me duelen los hombros más que nunca. Llevar al niño en un brazo mientras con el otro te agachas porque se le cayó el ''juice'' a la vez que haces malabares con los ''teddies'' para que no se te caiga ni uno no es compatible con limpiar la cocina para que el nene no chupe el suelo donde se tumban los perros, sin contar las lavadoras, planchar la ropa, y alguna que otra cosa más.
Pero bueno, compensa descansar en una cama de matrimonio y que el trato que recibo sea mejor que el que podría haber soñado.

Se acerca de nuevo el fin de semana y no podéis imaginar las ganas de que sea sábado para ir a Dublín. Tal vez quede con una amiga, pero sino me voy aunque sea sola, necesito salir de aquí, son muy majos y muy monos, pero un día sin niños se agradecerá.
Esta ciudad es pequeña, así que al terminar la jornada no tengo mucho más que hacer que dar una
vuelta o conectarme, y teniendo en cuenta que la entrega de trabajos la tengo este 14, es conectarse o conectarse.

Sin más, y tras el párrafo de resumen que pretendía escribir, me despido y hasta la próxima!

domingo, 7 de abril de 2013

Empezando

Una  semana, parece mentira pero hace ya casi una semana que estaba subiendo a un avión para venir a trabajar a Irlanda como au pair.

Hay veces que aun no creo que lo haya podido hacer, sobretodo recordando los dos días antes de venirme, estaba de los nervios! Compadezco a los amigos y familiares que tuvieron que aguantarme.


Pese a ser pronto para poder juzgar, me atrevería a decir que he tenido suerte con la familia, son simpáticos, atentos e intentan hacer y explicar las cosas de forma que me sea fácil entender. Los nenes, que decir, aparte de preciosos son muy graciosos. Los dos mayores me hacen reír mucho, sobretodo la nena que me recuerda a mí de pequeña, igual de trasto. El pequeño es adorable, pero aún le queda un poco para acostumbrarse a mí, hasta entonces me tocará aguantar algunos llantos más y verlo con las cejas fruncidas.


La casa está en una ciudad pequeña a una hora en bus de Dublín. No hay gran cosa que hacer y por lo que tengo entendido y he podido ver las tiendas son algo carillas y se encuentran en el centro de la ciudad. Realmente se me hace extraño que los bares estén concentrados en una zona, en ''mi barrio'', por ejemplo, no ves ni uno, si te apetece un café en una terraza, o te vas 15 minutos andando hasta el centro o te vas a tu jardín con un café soluble.


Los primeros cinco días los invertí en adaptarme a la casa y la familia y a conocer los alrededores del que será mi hogar durante, teóricamente, un año. 


La zona donde yo estoy es muy tranquila, es un barrio residencial a un paseo del centro. A un minuto andando hay un río que cruza la ciudad, y si lo sigo tengo el castillo más grande de Irlanda (el complejo normanda más grande de Europa) a unos 10 minutos. Hay ovejas y caballos, como si estuviese en mi pueblo, pero con el nivel de vida de la ''gente bien''.




Ayer, sábado, aproveché para ir a Dublín y de paso comprarme algunas cosas que necesitaba. La ciudad me encantó! No es muy grande, pero si lo que quieres es pasar un día tranquilo en una ciudad antigua rodeado de comida, bebida, y cultura irlandesa, es tu ciudad. 


 

Hasta aquí todo por hoy. Es un poco sosa la entrada, pero estoy oyendo como mi Hostdad afina las guitarras y me voy corriendo a hacer el ridículo!